El lugar protocolario de la infanta Elena: actos sociales que no puede cubrir el núcleo central de la familia real

La familia real española ha experimentado en los últimos años una serie de circunstancias que le han obligado a adoptar decisiones para mantener el respaldo popular hacia la monarquía.

Entre estos cambios promovidos por la Casa del Rey, uno de los más destacados ha sido el lugar protocolario que ocupa actualmente doña Elena en los actos institucionales. La infanta ya no ejerce el mismo papel en las actividades oficiales de la familia real que el que desempeñaba hace algunos años.

Para conocer el lugar protocolario que ocupa la infanta Elena, Monarquía Confidencial se ha puesto en contacto con Carlos Fuente, director del Instituto Universitario de Protocolo de la Universidad Camilo José Cela.

Fuera del 'núcleo central'

El hecho más destacado a partir del que empezó a evidenciarse esta situación tuvo lugar en 2012, cuando salió a la luz la implicación de los duques de Palma en la trama de corrupción Nóos.

Ese año, la Casa del Rey limitó el 'núcleo central', término popularizado a partir de entonces, de la familia real a los reyes y los príncipes de Asturias, desplazando de este modo a la infanta Elena a un segundo plano.

Los motivos

Según afirma Carlos Fuente, el Caso Nóos lo único que hizo fue “acelerar este proceso”. El cambio de imagen de la institución era “inevitable”. Junto a otros factores como la grave crisis económica por la que atraviesa España o el descenso de apoyo a la familia real, la trama de corrupción fue un desencadenante más.

De hecho, el experto en protocolo asegura que, de no haber salido a la luz los problemas de los duques de Palma con la justicia, La Zarzuela habría adoptado la misma decisión con el paso del tiempo, es decir, llegar a “una monarquía volcada en la calle”.

El rol 'social' de doña Elena

La infanta tiene una posición diferente a la de los reyes y los príncipes de Asturias. Ahora ejerce un papel “más social”.

Según Fuente, este cambio protocolario en el lugar que ocupa doña Elena no radica tanto en su mayor o menor presencia, sino en el tipo de actos a los que asiste.

Su cometido: cubrir los actos a los que no pueden asistir los reyes y príncipes

La infanta ha pasado de cubrir actos institucionales de primer nivel a acudir a actividades de carácter social, es decir, encuentros en las que está “cerca del pueblo”.

La Casa Real, según explica Carlos Fuente, “tiene que distribuirse el trabajo”. Por ello, mientras que el rey y el príncipe, acompañados por sus consortes, cubren los actos más relevantes, la agenda de doña Elena está ideada para mantener un contacto más cercano con los ciudadanos.

De este modo, la familia real está presente en todos los compromisos oficiales de máxima relevancia y, además, aprovecha el cambio de posición de doña Elena para fomentar una mayor comunicación entre la institución y la sociedad.

La reina y la princesa Letizia

Este papel también se podría aplicar a las funciones que desempeñan la reina y doña Letizia, que cubren una agenda cargada de actos sociales y culturales.

Sin embargo, el experto en protocolo explica la diferencia. Doña Sofía y la princesa de Asturias también cumplen con varios encuentros de este tipo, pero su asistencia a los mismos no impide que continúen cubriendo los actos institucionales de primer nivel.