En su libro “Por una convivencia democrática”

La propuesta de García-Margallo para acabar con la discriminación de la mujer en la sucesión al trono

Apuesta por modificar el apartado primero del artículo 57 de la Constitución Española que da preferencia a los varones en la línea hereditaria para la jefatura del Estado

El ex ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, propone modificar el artículo 57.1 de la Constitución Española para acabar con la discriminación de la mujer en la sucesión al trono, al considerar que entra en conflicto con el principio de no discriminación por sexo.

El artículo 57.1 de la Constitución Española dice textualmente: “La sucesión al trono seguirá el orden regular de primogenitura y representación, siendo preferida siempre la línea anterior a la posterior, en la misma línea el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el varón a la mujer”.

Esa preferencia masculina en la sucesión a la más alta magistratura del Estado es algo que el ex ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, considera que “difícilmente podrá defenderse hoy en día”. Y apuesta por suprimirla.

En su libro “Por una convivencia democrática. Una propuesta de reforma para adaptar la Constitución al siglo XXI”, García-Margallo considera que “la Constitución es algo más que una norma jurídica”, ya que “en su condición de norma suprema para la regulación de la convivencia dentro de una sociedad, irradia un determinado modelo ideológico y social”.

También afirma que la Carta Magna posee “unos valores fundamentales en los que resulta indefendible mantener la preferencia del varón frente a la mujer en el acceso a la jefatura del Estado”. Además de entrar en contradicción con “el principio de no discriminación por razón de sexo, recogido en el artículo 14 de la Constitución, así como con los convenios internacionales de derechos humanos que vinculan a España”.

Modificar solo la preferencia del varón sobre la mujer

Por ello, el ex ministro de Asuntos Exteriores apuesta por modificar el artículo 57.1, eliminando la referencia a la discriminación por sexos y “dejando inalterado el resto”. O bien “incluir en la Constitución una nueva disposición adicional que diera pie al desarrollo por ley orgánica de preceptos constitucionales con necesidad de ser interpretados conforme a obligaciones internacionales asumidas mediante tratados”.

Una reforma de esta naturaleza seguiría, además, según García-Margallo, “la tendencia ya formalizada en monarquías como las de Suecia (1980, artículo 1 de la Ley de Sucesión), Países Bajos (1983, artículos 24 y 25 de la Constitución), Noruega (1990, artículo 6 de la Constitución) y Bélgica (1991, artículo 85 de la Constitución).

Sí a la inviolabilidad del rey

No obstante, no considera “necesario” tocar la formulación del artículo sobre la inviolabilidad del monarca, “ya que la interpretación conjunta de este precepto con el resto de la Constitución y con los tratados internacionales celebrados por España conduce a una salida razonablemente consecuente”. Aunque no niega que sea “conveniente” que la institución de la Corona “sea regulada en una ley orgánica”.

 

Video del día

Marta Rovira confirma que negocia con Sánchez
un referéndum de independencia para Cataluña
Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato