La princesa Victoria de Suecia cancela su asistencia a los Juegos Paralímpicos de Sochi en protesta por la postura de Rusia en su conflicto con Ucrania
A los Juegos Paralímpicos de Sochi, que comienzan esta semana, asistirán un menor número de representantes institucionales que a la anterior competición deportiva celebrada en Rusia. La última en confirmar su ausencia en este encuentro ha sido la princesa Victoria de Suecia.
La heredera al trono sueco, que si asistió a los Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en Sochi en febrero, no estará presente en la competición que comienza este viernes en protesta por la posición adoptada por Rusia en el conflicto con Ucrania.
Victoria, que debía desplazarse a Sochi en los próximos días para apoyar a los atletas suecos que participan en la competición, ha argumentado que no viajará a esta ciudad con motivo de la “invasión militar de las tropas rusas en la península de Crimea”.
La decisión adoptada por la hija de los reyes Carlos Gustavo y Silvia se produce en medio de la crisis internacional desencadenada en Europa del Este, tras las últimas declaraciones emitidas por el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, en las que ha desmentido que Moscú haya desplegado sus tropas en ese territorio e invita a las autoridades de Kiev y Crimea a verificar sus palabras.
Victoria de Suecia no es el único miembro de la realeza europea que ha cancelado su asistencia a los Juegos Paralímpicos de Sochi que se celebrarán del 7 al 16 de marzo.
La princesa Marta Luisa de Noruega, hermana del heredero al trono, el príncipe Haakon, tampoco se desplazará a Sochi para apoyar a los atletas de su país en esta competición. La ausencia de la hija del rey Harald en estos juegos es notablemente significativa, teniendo en cuenta que Marta Luisa auspicia diversas fundaciones destinadas a facilitar ayudas para personas con discapacidad.
