Felipe VI: frialdad ante Mas y cercanía con Urkullu
El monarca mantiene una buena relación con el lehendakari, mientras que la última pitada al himno nacional de la que fue testigo en Barcelona ha enfriado aún más su contacto con el presidente catalán
Ambos son líderes autonómicos, uno del Gobierno Vasco y el otro de la Generalitat de Cataluña. Los dos defienden una reforma del modelo de Estado, aunque desde planteamientos distintos. Pero la gran diferencia que se ha hecho más evidente en los últimos días entre los presidentes regionales Iñigo Urkullu y Artur Mas es su relación con el rey.
El presidente de Cataluña y el lehendakari se vieron con don Felipe en público hace varios días. El primero, con motivo de la audiencia oficial celebrada en el Palacio de La Zarzuela el viernes pasado, enmarcada en la ronda de encuentros con los líderes autonómicos, y el segundo, cuando el rey viajó a Bilbao el lunes para entregar el premio Reino de España.
Ambos encuentros sirvieron para evidenciar la relación que el jefe de Estado mantiene con estos presidentes. En el caso de Urkullu, cercana y cordial, y con Mas, fría y distante.
La sonrisa durante la pitada al himno
La idea secesionista del presidente de la Generalitat viene marcando distancias desde hace tiempo con la Corona. El líder de Cataluña está empeñado en llevar a cabo su plan independentista, lo que ha provocado cierta tensión con el resto del territorio español y con los elementos que simbolizan la unidad del mismo.
En esta tesitura, cabe destacar el gesto que tuvo Artur Mas con el monarca durante la pitada al himno nacional en la primera Copa del Rey de Felipe VI. Mientras el jefe de Estado aguantó impertérrito el ‘chaparrón’, el líder de la Generalitat sonrió con cierta sorna mientras sonaban las protestas en el Camp Nou.
Le recibió con semblante serio en La Zarzuela
No es de extrañar que, por gestos como el anteriormente mencionado, don Felipe recibiese el viernes pasado a Mas en La Zarzuela con un semblante más serio del habitual.
El monarca marcó distancias durante ese encuentro con el presidente catalán, mostrando una actitud fría durante el posado fotográfico para los medios gráficos.
“Cordialidad” con Urkullu
La relación de Felipe VI con el lehendakari, Iñigo Urkullu, dista completamente de la que mantiene actualmente con el presidente de Cataluña.
El líder del Gobierno vasco aboga por una reforma del modelo de Estado, pero siempre desde el diálogo. Personas de su entorno mas cercano definen la relación que mantiene con el rey Felipe como “muy buena” y marcada por la “cordialidad”.
Gestos como el de asegurar al monarca que “Euskadi no se saltará la ley” -durante una audiencia oficial celebrada en octubre- han contribuido a que don Felipe acerque posturas con el lehendakari.
En su último encuentro celebrado en Bilbao, esta semana, el rey se mostró amable y cercano con Urkullu en público, estampa opuesta a la que el jefe de Estado protagonizó días antes en la audiencia con Artur Mas.
